Los replicadores de energía armonizan la instancia donde se encuentran. Relajan el ambiente y ayudan a la concentración.
Este de la imagen le tengo yo en mi salón, os lo pongo como ejemplo pero aquí como en casi todo en esta vida, el límite está en vuestra imaginación!!
Lo que hay que tratar de hacer es que de alguna manera los 5
elementos estén presentes.
— El
agua es parte de nuestro cuerpo, y es imprescindible para la vida en la
tierra o sea que siempre está presente en jardín según los principios del
Feng Shui. Agua corriente, que da movimiento al aire, y la corriente de aire
es la energía (Chi). El agua parada es negativa: debe estar siempre en
movimiento. Existen pequeñas fuentes que quedan muy bien y armonizan el
ambiente,
— El
fuego se relaciona con el calor en los metales, la energía térmica, la
combustión. En el Jardín se trata del Yang, de un fuego entre amigos y entre
las piedras, luces de decoración nocturna. Sumar flores rojas, es una buena
idea.
— La
tierra es nuestro hábitat, la referencia cero en la electricidad. La
montaña y la piedra. son parte de este elemento y se representan por ellas
mismas aunque algunas variantes pueden ser cerámicas y muros de piedra.
— El
metal es un buen conductor de energía, electricidad y las superficies
metálicas pueden ser buenas reflectoras. Su color podría ser blanco, plateado o
gris y su forma en arco o círculos. Quedan muy bien las piedras blancas, por
ejemplo.
— La
madera son los árboles, las plantas, el elemento más importante al hacer
nuestro jardín. Claro que el color no podría ser otro que el verde, símbolo de
vida vegetativa, de la fotosíntesis y su maravillosa transformación, la
respiración y transpiración de las plantas.
Ahora lo que queda en tus manos es tener en cuenta la
combinación de estos elementos y usa la creatividad para crear tu pequeño (o
gran) jardín de energía.
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